Los barrios más humildes de la capital salen a la calle para denunciar el auge de casas de apuestas en estos distritos madrileños y luchar contra la normalización de la ludopatía.
Desde hace unos años, diferentes localidades españolas, entre ellas Madrid o Barcelona, denuncian el aumento de casas de apuestas en sus barrios obreros y rechazan la normalización de la ludopatía y el «vacío legal» que beneficia a este tipo de empresas.
Este pasado domingo, más de 3.000 personas se manifestaron en la Calle Bravo Murillo (Madrid), para denunciar dicha situación bajo el lema «Ellos se lucran, la clase obrera se arruina». Tachan a estos negocios como «una especie de pandemia» que afecta agresivamente a miles de familias trabajadoras a diario.
Según datos oficiales, dicha calle se ha convertido en la localización con más casas de apuesta en Madrid; en total 16 a casi 2 kilómetros de distancia. Muchas de ellas, cerca de centros escolares y espacios con alta vulnerabilidad. Además, otros barrios madrileños como Vallecas, Lavapiés o Tetuán, se han convertido en los distritos más castigados por las casas de juego de toda España.
El vecindario afirma que este tipo de aperturas masivas de casas de apuestas, fomentan alarmantemente la ludopatía, sobre todo en l@s más jóvenes, y conlleva a muchas familias a caer en tragedias económicas.
Diferentes organizaciones, tanto nacionales como internacionales, como la OMS, han afirmado que la ludopatía es una enfermedad reconocida de nuestro siglo. Por ello, rechazan la apertura de este tipo de negocios ya que a corto plazo, se convierte «en la nueva heroína para l@s jóvenes».