El Café Comercial de Madrid recibe a una de las artistas más polifacéticas que Actualidad Joven ha tenido la suerte de conocer. Chloé Bird es una cacereña, risueña, que lleva interpretando música desde que tenía cinco años en el conservatorio. También estudió Artes Escénicas en Extremadura. Desde entonces, ella asegura no haber dejado de trabajar en lo que más le apasiona.
¿Quién es Chloé Bird?
Hablar de mi en tercera persona se me va a dar fatal – Dice entre risas. Voy a hablar de mí en primera persona que me resulta menos pedante. Soy cantante y compositora. Nací en Cáceres en 1991, quien quiera ponerme años que eche las cuentas. Me dedico a la música profesionalmente desde hace varios años. Todo lo que he estudiado me ha llevado hasta donde estoy ahora. Acabo de sacar mi último disco The Light In Between que salió en septiembre. Estoy girando por España, muy contenta y feliz.
Generalmente mezclas la Música Clásica con el Pop ¿con qué género te identificas?
Mi corazón es bastante pop, hubo una temporada de mi vida que me sentía acomplejada porque parecía que este género musical estaba denostado. Pero he aprendido que hay Pop con mucha calidad y musicalidad y ya no me avergüenzo de ello, de dedicarme a ello. En mi manera de componer también se notan las raíces de la música clásica porque estudié conservatorio y creo que este género sigue dentro de mi. Me identifico con el Pop y el Rock.
Todos caminamos en hombros de gigantes, supongo que algo o alguien habrá inspirado a Chloé Bird ¿qué te mueve a crear fuera de la música?
Me inspira todo. Los trabajadores artísticos, la suerte y la desgracia que tenemos, es que estamos las 24 horas del día trabajando. Todo te puede servir como fuente de inspiración como películas, libros, museos, música, etc. Creo que de todo se puede aprender y todo te puede nutrir. La música es mi fuente de inspiración primaria aunque también los colores, las formas. Todo puede darte ideas para componer canciones, como observar a otras personas desde una esquina en silencio. Tus experiencias personales es el material que tienes más a manos.
¿Cómo crees que has evolucionado desde que empezaste hasta ahora?
Me considero una persona más madura que cuando empecé, lo que tiene cumplir años. Analizo más las cosas, soy más exigente conmigo misma. Siempre he sido muy perfeccionista pero la enfermedad aumenta con los años. También más inconformista porque busco nuevos sonidos y me gusta experimentar. Ya no tengo todo tan claro como antes. A veces, la ignorancia es muy osada. Siento que cuanto más aprendo menos me atrevo. Inconscientemente, más me pienso las cosas y más artesanal se vuelve mi proceso compositivo.
Has recurrido a la estrategia de crowdfunding donde la protagonista es tu abuela ¿cómo surge esta idea? ¿cómo fue acogida por el público?
Responde riendo – Para este disco quería apostar por mi música y todo lo que la rodea. Era un proceso que costaba mucho dinero. A parte de otras formas de financiación, me plantee la del crowdfunding. Al principio me echaba para atrás, tenía miedo a que pareciese caridad, como pedir limosna. Cuando lo estudias te das cuenta de que es simplemente vender tu disco de forma anticipada, con la oferta de productos exclusivos que puede que no se consigan de otra manera.
Buscaba interactuar con el publico y comprobar como evolucionaba mi música en ellos, como les llegaba y hasta que punto estaban dispuestos a apoyarme. En ese sentido ha sido una experiencia maravillosa, me he sentido muy arropada porque casi 200 personas han participado económicamente en el disco, mecenas de este álbum.
Estudiando el crowdfunding me di cuenta de que había que hacer varios videos tenía que hacerme notar, porque son 40 días de campaña. Me daba vergüenza hablar de mi misma en un video, tratando de vender que soy la mejor y que apostasen por mi. Entonces empecé a pensar que quién puede hablar mejor de mi que mi abuela. Aposté por ello. Con mi abuela, que es maravillosa y súper divertida, de protagonista.
Tu disco es una continuación del anterior. Utilizas el claro oscuro en los matices musicales y en la estética de cada videoclip. ¿Cómo es el proceso de composición?
Depende de cada canción aunque tienen un proceso similar. Hay canciones que llevan años escritas, otras surgen después de la música, de experiencias personales que me han marcado en mi vida, etc. Desde que empecé he escrito varias canciones, aunque no tengo un repertorio muy amplio. Pero en mi álbumThe darkest corners of my soul recuerdo que iba primero la música y luego la letra. También me daba cuenta de que cada canción pertenecía a una etapa diferente de mi vida, con un denominador común que era la sinceridad y la luz. Encajaban y por eso surgió este nuevo disco.
¿Cuánto mayor esfuerzo mejor resultado?
Depende. Creo mucho en el trabajo, la constancia y disciplina, me han demostrado que eso funcionaba. También he estudiado en el conservatorio y ello requiere mucha tenacidad. Pero en definitiva la clave es dedicarle mucho trabajo.
Tengo un espíritu trabajador y perfeccionista, casi enfermizo, y en la música no es diferente. Creo en el tesón más que en el talento. Todo el mundo tiene talento en algunas tareas aunque hay que descubrir para que lo tenemos.
En los procesos artísticos existe también la magia. Puede ser que las canciones salgan perfectas sin mucha dedicación, con espontaneidad. Nosotros llevamos muchos procesos preparados aunque siempre experimentamos e investigamos en el momento de grabación. Puede que surjan mejores ideas en el estudio.
Tu nuevo CD, en comparación con The darkest corners of my soul, se expande hacia nuevas fronteras, hacia un mundo inhóspito. ¿The Light in Between define tu percepción sobre el mundo y la historia?
Si, plasma mi forma de comprender o de no comprender el mundo. Somos capaces de lo mejor y lo peor y no sabemos en que momento estamos. Parece que no aprendemos de nuestra historia y que no vemos más allá de nosotros mismos. Esto queda plasmado en el disco. Somos absurdos, hay veces que nos hacemos daño a propósito. No nos damos cuenta de que lo único que tenemos es a nosotros mismos. Pero por otro lado se encuentra la belleza del ser humano como el arte, el amor y la conexión entre el ser humano.
La canción Mirror Mirror,por ejemplo, puede ser una canción que encierre muchas cosas. Puede parecer una canción de amor o de desamor pero en realidad no lo es. En este disco trato el amor al prójimo, diferente de lo habitual, del amor al uso de pareja. Mirror Mirror es esa diferencia entre lo que creemos que somos y lo que somos en realidad. La impresión que damos hacia fuera. O cuando nos miramos en el espejo y no nos reconocemos y te preguntas cómo has llegado hasta esa situación de la vida donde te cuestionas quién eres. Ahí puedes encontrar cualquier tipo de respuestas. Positivas o negativas.
¿Un adelanto de cómo será tu concierto el 14 de noviembre en Café Comercial de Madrid?
No voy a desvelar mucho porque quiero que todo el mundo venga a verlo. Pero os esperamos en modo dueto Victoria González y yo. Y qué os voy a decir. Ella es una crack que ha hecho la percusión del disco. Quiero que la gente venga al Café Comercial y que disfruten del concierto, de nuestra música en directo.
¿Consejos hacia aquellos que empiezan en el mundo de la música?
Que crean en sus proyectos, porque si no lo hacen ellos mismos nadie lo hará, que trabajen y que lo intenten mientras les haga feliz.