SINC
El brote de listeriosis originado en Sevilla (que empieza a remitir) cuenta hasta el momento con más de 200 afectados y más de 500 casos sospechosos. El pasado jueves el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social dio la alerta internacional y se ha comunicado con las autoridades europeas y la Organización Mundial de la Salud (OMS) por si se encuentran casos en otros países. Ya se ha detectado un caso en el extranjero.
La causa es la carne mechada comercializada por la empresa sevillana Magrudis S.L. bajo la marca La Mechá. De todos los casos afectados, 108 se encuentran ingresados en Andalucía, el resto en Extremadura, Asturias, Cataluña, Madrid y Aragón. 34 son mujeres embarazadas y hay cuatro personas en la UCI. Por ahora, al menos ha habido dos víctimas mortales.
La listeriosis es una enfermedad causada por ingerir alimentos contaminados con la bacteria Listeria monocytogenes, encontradas con frecuencia en la tierra y en el agua.
“Afecta fundamentalmente a personas de edad avanzada, personas inmunodeprimidas, mujeres embarazadas y recién nacidos. Con menor frecuencia también pueden verse afectadas personas que se encuentran fuera de estos grupos de riesgo”, explica a Sinc Joaquín V. Martínez-Suárez, del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA) e investigador del proyecto del programa estatal de I+D+i sobre “Alternativas al uso de desinfectantes en la industria alimentaria”.
La bacteria puede aparecer en la carne cocinada si se rompe la cadena de frío. “Debido a su amplia distribución en el ambiente y en todos los eslabones de la cadena alimentaria, la erradicación total de Listeria monocytogenes en los ambientes de la producción de alimentos es imposible. El objetivo de los sistemas de control y prevención es reducir el riesgo al mínimo posible”, añade el científico.
La bacteria de la listeria no solo habita en la carne de cerdo o en los embutidos, sino también en lácteos y vegetales, y en el pescado ahumado. Por ello, es importante, en verano sobretodo, no dejar estos alimentos fuera de la nevera y hacer una manipulación correcta de los productos.
Proyecto ‘Listeria Cero’
El INIA, desde el 2014, forma parte del proyecto nacional ‘Listeria Cero‘ en el Centro para la Calidad de los Alimentos de Soria. Su objetivo es reducir la presencia de esta bacteria en alimentos curados, lo que facilita su exportación a otros países. En él participa la investigadora Ana García Lafuente.
‘Listeria Cero’ se configura como un plan del Gobierno y las interprofesionales españolas de la cadena de producción porcina para desarrollar una estrategia de investigación, innovación y desarrollo tecnológico dirigida a la reducción de la presencia de listeria en la producción de alimentos cárnicos derivados del porcino.
En el proyecto, los investigadores trabajan en la caracterización de la contaminación de listeria a lo largo de la cadena de producción en la industria cárnica, la eliminación de la bacteria y en la evaluación del riesgo de contaminación. Además, estudian estrategias de eliminación de estos patógenos mediante compuestos antimicrobianos de origen natural. Ahora atraviesa su segunda fase.
Actualmente investigan el efecto de añadir antibacterianos a los jamones para observar si, una vez contaminado, no crece la bacteria y se inactiva a lo largo del proceso.
La presencia de listeria es un problema sanitario y comercial
La directora general del INIA ha reconocido en varias ocasiones que la presencia de listeria en los productos curados les genera a las industrias cárnicas españolas no solo un problema sanitario, sino también comercial.
Esto ocurre porque los productos españoles cumplen la legislación europea, pero hay algunos países que no están acostumbrados a consumir productos curados, como Estados Unidos y el sudeste asiático, que están incrementando la compra de productos alimentarios españoles y donde su legislación es más restrictiva.
La industria cárnica española solicitó al INIA ayuda, lo que derivó en la puesta en marcha del proyecto ‘Listeria Cero’, con el que el sector privado colabora con un 10 % de la financiación, que alcanza los 1,4 millones de euros para los dos próximos años.