Durante la última semana la plataforma de streaming Twitch ha sido tema de conversación en redes a causa de las reclamaciones por derechos de autor. Según la plataforma ha recibido una “llegada repentina de reclamaciones de eliminación de DMCA por clips con música de fondo de 2017 a 2019”.
Como consecuencia, han penalizado con strikes a usuarios de la plataforma y estos alertaron sobre la actuación de Twitch, generando una situación de pánico en Twitter, ya que banea permanentemente a sus usuarios a los tres strikes y no habían recibido ningún tipo de aviso al respecto.
Hasta entonces, la Digital Millennium Copyright Act (DMCA) figuraba en las directrices de Twitch del mismo modo que en otras plataformas, pero no había penalización a streamers, entre otras cosas, porque la plataforma silencia la música que aparece en los directos automáticamente.
A diferencia de los directos, los clips (vídeos de una duración máxima de un minuto con contenido de los directos) permanecen en la plataforma. Así, las discográficas los han utilizado como “pruebas” de las infracciones de DMCA.
Para prevenir cualquier tipo de sanción, sus usuarios han borrado los clips anteriores a esta semana del canal, como en el caso de la community manager de Omen, Mayichi, o el streamer de G2 Ibai Llanos.
Las directrices de Twitch
Según las directrices de Twitch, sus usuarios pueden utilizar la música que sea de su propiedad, de la que tengan su licencia (parcial o completa) o la que esté incluida en Twitch Sings, su juego de karaoke.
En las directrices establece ejemplos de lo que no se puede hacer con el contenido musical en las retransmisiones:
- Programas de música de estilo radiofónico: una transmisión o VoD de Twitch que se centre en la reproducción de música que no sea tuya, y para la que no tengas licencia para compartir en Twitch.
- Sesión de DJ: la reproducción o mezcla de pistas de música pregrabadas que incorporen música que no sea de tu propiedad o que no tienes derechos para compartir en Twitch.
- Actuación de karaoke: cantar o actuar en una grabación de karaoke que no se encuadre en un juego con licencia para que la compartas en Twitch, como por ejemplo una actuación de Twitch Sings.
- Playbacks: cantar o simular o fingir que cantas una canción que no es tuya o que no tienes licencia para compartir en Twitch.
- Descripción visual de música: letras, transcripción musical, tablatura o cualquier otra representación visual de música con copyright que no sea tuya o que no tengas licencia para compartir en Twitch. Tampoco puedes incluir en pantalla las letras o descripciones de música proporcionada por Twitch como parte de Twitch Sings o que hayas capturado en transmisiones o VoD de tus actuaciones en Twitch Sings.
- Representaciones de versiones de canciones: reproducir una canción que sea propiedad de otra persona, a excepción de una actuación en directo en tu transmisión de Twitch. Si versionas una canción en una transmisión de Twitch en directo, asegúrate de reproducirla tal y como la escribió su autor y de crear tú mismo todos los elementos de audio, sin incluir pistas instrumentales, grabaciones de música ni otros elementos grabados que sean propiedad de otros.
A pesar de que Twitch fecha las reclamaciones por contenido desde 2017 hasta 2019, hay streamers que advierten sobre reclamaciones de clips más antiguos, como en el caso de NepentheZ y la banda sonora de Fifa.
Por ahora, Twitch ha anunciado que extenderá el uso de Audible Magic (la misma herramienta que borra el contenido con copyright de los directos) a los clips, al mismo tiempo que alerta del riesgo sobre utilizar música con copyright “incluso si solo estás reproduciéndola de fondo o por unos pocos segundos”.
Alternativas para emitir música
En los últimos años, Twitch ganó fama gracias a su permisividad respecto al copyright, frente a los problemas de YouTube con sus sistemas de monetización y reclamación de contenido DMCA. En el momento que YouTube admite la reclamación de contenido por copyright de un vídeo, la persona a la que pertenezca deja de recibir dinero de sus visualizaciones.
Esta situación ha llegado a afectar a los gameplays, con reclamaciones de música que no debería verse afectada, pero lo hace porque alguien reclama sus derechos. En septiembre de 2019 el autor de la música de Minecraft C418 advirtió a YouTube que la tienda CD Baby reclamaba su música sin tener los derechos.
Para prevenir este tipo de situaciones, existen librerías de música y sellos discográficos que permiten su uso, gratis o mediante un pago por su licencia. En el caso de YouTube, es muy frecuente pagar por música de Epidemic Sound o utilizar los temas de No Copyright Sounds. Proximity permite utilizar su música en los streamings, mientras que Monstercat tiene un reproductor en Streamlabs.
Desde Twitch recomiendan librerías como Jamendo o FyrFly. Además de la música con licencia, Jamendo tiene música gratuita libre de derechos, siempre que se reconozca su autoría.