Los vikingos están de moda. La popular serie del Canal Historia «Vikings», ha situado otra vez a estos antiguos guerreros en el mapa social, generando miles y miles de interesados en las hazañas que protagonizaron hace más de mil años. Sí, yo me encuentro entre ellos. Y sí, los nórdicos me tienen enamorado.
Bien es cierto que la serie televisiva está muy contrastada e intenta ser fiel a los ritos y costumbres de los vikingos dada la categoría del Canal Historia. Pero, como toda ficción, tiene partes que solo están ahí para enriquecer el espectáculo. Distinguir las leyendas de la realidad suele ser una tarea complicada, puesto que muchas veces ni nosotros mismos estamos dispuestos a aceptar según que realidades. Hoy os traemos una pequeña serie de curiosidades para confirmar o desmentir algunos de estos mitos sobre el pueblo de Ragnar Lodbrok.
El famoso casco vikingo
¿Sabríais decirme como era un casco vikingo? A más de uno se le habrá venido a la cabeza la imagen de un hombre barbudo con un casco coronado por dos imponentes astas. Pues lamentamos deciros que ese casco jamás existió. Los vikingos utilizaban un modelo de casco simple, lo suficiente como para cubrirles el cráneo y la nariz. Sin duda, un diseño mucho menos imponente que lo plasmado en nuestra cultura popular. Aunque mucho más práctico.
El hacha
¿El arma más representativa del pueblo vikingo también era falsa?. Por supuesto que no. Parece que la habilidad de los nórdicos empuñando esta temible arma hizo una profunda mella en la cultura popular del momento… y seguro que en muchos cascos de sus opositores. Les servía para el combate y para las tareas cotidianas, por lo que tenían un gran conocimiento sobre su uso y forja.
El aseo
La imagen de un vikingo no corresponde con la de el estereotipo de «bárbaro». Más que nada porque se suele asociar a este concepto una clara falta de higiene, algo que este pueblo no podía consentir. De hecho, eran muy aseados para los estándares de la época.
El papel de la mujer
Una de las cosas que más me descolocaron cuando comencé a ver la serie «Vikings» fue el papel de la mujer en ella. Era frecuente ver a mujeres en el campo de batalla, incluso a alguna comandando ejércitos (Lagertha, esto va por ti). En principio pensé que sería algún tipo de licencia que se había permitido la serie para adaptarla a los tiempos que corren, pero nada más lejos de la realidad. Las mujeres vikingas gozaban de un libertad impensable para la época. Sabían leer y escribir, podían escoger marido, realizar casi cualquier empleo y eran muy respetadas por los varones.
La religión
Una de sus normas más sagradas y uno de los factores que más atemorizaba a los pueblos invadidos. ¿Iba la mitología nórdica orientada a la guerra?. Sí, la religión vikinga iba enfocada en su totalidad al combate. Si mueres en una disputa, irás al Valhalla con los dioses. Estos eran sus modelos a seguir y no eran más que representaciones de la guerra y la lucha.
Asesinato y pillaje
De nuevo, Hollywood entra en escena. Los cineastas estadounidenses se encargaron de recopilar toda esa leyenda negra que todavía quedaba de los nórdicos y les transformó en unos bárbaros sedientos de sangre cuyo único objetivo era el asesinato y el pillaje. Su intelecto no avanzaba más allá del golpear y el cortar. Aquí se puede desmentir y confirmar, aunque es más bien lo primero. Sí, no faltaron hombres y mujeres que se echaron a la mar con el objetivo de volver cargados de oro y joyas. Y sí, sus métodos (sobretodo en los primeros contactos) no fueron intercambios cordiales. Sin embargo, eran mucho más inteligentes de lo que los propios invadidos pensaban.
Los vikingos eran un pueblo muy observador. Analizaron las costumbres de sus enemigos y buscaron sus puntos flacos para ganar ventaja sobre ellos. No se lanzaban a la carga como inconscientes cuando todos los soldados estaban listos para la batalla. Preferían atacar cuando se estuviese celebrando la Santa Misa cristiana. Simple y efectivo. ¿Eso les convertiría en meros saqueadores al fin y al cabo, no? Para nada. No solo saqueaban, también colonizaban. Como ejemplo tenemos Irlanda, conquistada y posteriormente poblada por los nórdicos. Tras varios siglos de convivencia entre ambos pueblos, sus culturas se fusionaron. Hoy en día se pueden observar restos de la cultura vikinga en las tierras gaélicas.
La navegación
Sí, lo mejor se ha quedado para el final. Los vikingos eran unos navegantes excepcionales, los mejores de su época. Fueron los primeros en atreverse a surcar la alta mar, guiándose mediante brújulas solares. Estos grandes avances les permitieron llegar hasta territorios muy alejados, lugares donde lo último que esperaríamos encontrarnos sería un guerrero normando. Llegaron hasta España, donde atacaron la costa musulmana del Mediterráneo. Italia tampoco se pudo resistir al saqueo nórdico. Como ejemplo tenemos el puerto marítimo de Pisa, que acabó cayendo ante el caudillo Bjorn Ragnarsson. Y, como tope, llegaron hasta nada más y nada menos que Afganistán. Parece una broma, pero no es así.
El siguiente dato sí que ha llegado a sorprender a muchos, trastocando su concepción de la Historia tal y como la conocemos. ¿Quiénes fueron los primeros europeos en llegar al continente de América?. Querido lector, más pistas no puedo darte si has llegado a esta parte del artículo y todavía piensas que la expedición de Cristobal Colón fue la primera en pisar tierras americanas. Hay que decir que Colón fue el descubridor y comunicador del hallazgo para toda la Europa católica, apostólica y romana… pero los vikingos ya establecieron colonias en la actual Canadá allá por el año 982 d.C. Se calcula que los primeros asentamientos contaron con una población de entre 3000 y 5000 personas.
Espero que estos datos hayan conseguido arrojar un poco más de luz sobre la cultura de uno de los pueblos con más leyenda negra a sus espaldas. Para más información, recomiendo encarecidamente la serie «Vikings», que no solo muestra con gran veracidad las costumbres vikingas de le época. También cuenta con una trama excepcional.
«Skål».
«Ragnar Lodbrok nunca muere.»
Fer V.C.