House of Cards ha sido una de las series más importantes de los últimos años y uno de los grandes pelotazos de Netflix. La serie ha obtenido 165 nominaciones a galardones y ha ganado un total de 26, entre los que se incluye un Emmy en 2014, dos premios del Sindicato de Actores y un globo de Oro a Spacey. Ahora está gravemente dañada por las últimas declaraciones contra su protagonista.
Ocho hombres que trabajaron en la serie han declarado que Kevin Spacey se comportaba como un depredador sexual, a raíz de las declaraciones de Anthony Rapp, el primer actor de la serie que declaró en la revista BuzzFeed que el protagonista intentó seducirle teniendo él tan solo 14 años (en 1986).
Más tarde llegaron a la CNN testimonios anónimos donde se relataban otros abusos por parte del susodicho. Destaca el caso del ayudante de producción, que explicó con todo detalle los abusos del actor aunque él especificase que se sentía incómodo. Esto ocurrió cuando trasladaba a Spacey al rodaje, tanto en el coche como fuera de él.
“Me dejó en estado de shock. Es un hombre muy poderoso en la serie y yo soy el último en la cadena alimenticia”
“Le hice saber que me sentía incómodo en esa situación”.
Declaró la fuente anónima.
Después de que salieran a la luz estas declaraciones, Spacey hizo una declaración pidiendo disculpas públicamente mientras se exculpaba en el alcohol y reconoció abiertamente su homosexualidad.
Al conocerse la noticia, Netflix anunció que la sexta temporada sería la última de la famosa serie y canceló la producción, asegurando que no se reanudaría “hasta poder contestar las preocupaciones del rodaje”. Aunque otros miembros del equipo han declarado que el abuso se producía a la vista de todos, Netflix asegura que solo fue informada de un incidente hace cinco años resulto y promete que colaborará con sus productores para mantener un ambiente laboral “saludable y respetuoso”.
Finalmente, el actor declaró ayer que iba a “tomarse un tiempo para buscar asesoramiento y tratamiento”.