El origen del término tiene tres teorías y no, ninguna tiene que ver con la esclavitud. En Actualidad Joven os las explicamos y os aconsejamos para no caer en falsos descuentos.
Aunque no hay una explicación clara sobre los orígenes del Black Friday, puede asegurarse que no tiene nada que ver con la esclavitud, como afirman algunos perfiles de redes sociales.
Según el Canal Historia, el término se acuñó en primera instancia para referirse a una crisis económica: el viernes 24 de septiembre de 1869, dos financieros de Wall Street, Jay Gould y Jim Fisk no lograron beneficios y el mercado entró en bancarrota.
Otra de las teorías que recoge la misma fuente se basa en el día libre que los empresarios estadounidenses daban a sus empleados después de Acción de gracias (que se celebra el último jueves de noviembre), tras un año de pérdidas. Así, las compras que realizaban las familias hacían que las cuentas de los comercios pasaran de números rojos a negros (beneficios).
La última teoría relaciona el término con un uso que le otorgaron los policías de Filadelfia cuando hablaban del día después de Acción de gracias (como en el caso anterior, pero en torno a 1961) en el que había un gran tráfico de gente y vehículos. Como tal, comenzaría a popularizarse sobre 1966 y se extendería al resto de estados a partir de 1975.
Su acogida en España se debe a las siguientes causas: el factor de beneficio entre empleados y clientes, debido a que las empresas comienzan a facturar antes de las fiestas y, a su vez, los clientes obtienen descuentos… y a que Amazon lo importó.
Cada vez es más habitual encontrar precios “inflados” días antes del Black Friday, engañando a los consumidores. Para no caer en este tipo de trucos, estas son nuestras recomendaciones:
-Tener más cuidado del habitual con los precios. Siempre tiene que aparecer el precio original o porcentaje de rebaja respecto al que se indica.
-Probar antes de comprar. No se permite que las tiendas vendan como rebajados productos defectuosos, pero la garantía es la misma: las tiendas no están obligadas a devolver el dinero por un producto que no guste o no sea de la talla que el consumidor necesita. Además, siempre que lo indiquen, las tiendas pueden aplicar condiciones especiales, como no admitir pagos con tarjeta o cambiar su política de devoluciones.
-Comenzar a mirar lo que vayamos a comprar semanas antes. Hay marcas que realizan descuentos antes del Black Friday. También debemos comparar entre los distintos vendedores, ya que puede haber una gran diferencia entre los descuentos que aplican unos y otros.