El Consejo de Ministros ha dado luz verde este martes al anteproyecto de Ley Orgánica de Garantía Integral de la Libertad Sexual, donde se plantea una reforma en el Código Penal para, entre otros aspectos, eliminar la diferencia entre abuso y agresión sexual.
Este anteproyecto de ley pone en el centro el conocimiento expreso de la víctima, por lo que la ley de se conoce como la ley del solo sí es sí. Con esta ley no se volverá a cuestionar si la víctima dijo «no», o cuántas veces dijo no.
Esta es «la ley del ‘solo sí es sí’, es la ley del movimiento feminista», afirmó Irene Montero en la rueda de prensa donde anunciaron la luz verde del Gobierno para este nuevo anteproyecto.
La nueva ley, impulsada por el Ministerio de Igualdad encabezado por Irene Montero, también castigará el denominado como delito de «acoso callejero» y con su aprobación se creará una red de servicios de información y «centros de crisis» 24 horas.
¿Qué cambiará esta nueva ley?
La nueva ley pretende eliminar cualquier tipo de violencia sexual que sufren las mujeres y reconoce, por primera vez, muchos de los delitos que suponen que suponen una vulneración en cualquier forma del derecho a decidir acerca de la vida sexual: «agresiones sexuales, acoso sexual, acecho, extorsión y engaño pederasta», según ha recogido RTVE.
Uno de los puntos más importantes de la ley es el consentimiento. No se volverá a dudar entre agresión o abuso sexual, ya que si no hubo consentimiento expreso, se considerará agresión sexual.
En tercer lugar, se establecerán penas de 1 a 4 años de prisión como castigo a cualquier comportamiento «que atente contra la libertad sexual» de las mujeres sin ningún consentimiento.
Por otro lado, otro de los aspectos que cambiará este proyecto será la ley de extranjería, ya que establecerá que no se pueda expulsar a las mujeres migrantes sin papeles que denuncien haber sufrido violencia sexual.