Ouka Leele nació en Madrid en 1957. Principalmente es fotografa, sin embargo su primera vocación fue la pintura, de hecho cursó Bellas Artes. Acabó abandonando la carrera para estudiar piano a la vez que iba al photocentro de Madrid a aprender fotografía. Aunque ella asegura en muchas de sus entrevistas, que aprendió de forma autodidacta.
Publicó sus primeros trabajos en un libro llamado Principio. Después, en 1978 comenzó a exponer por primera vez. Sus fotos eran habitualmente en blanco y negro, porque le parecía que el color que adquiría la fotografía era irreal.
Comenzó a usar el color en sus obras tras un encargo que le hicieron para la revista Star en 1978. Primero hizo e imprimió las imágenes en blanco y negro y ella decidió inventarse el color de la imagen usando acuarelas sobre la fotografía. Después continuó aplicando esta técnica consiguiendo unir lo que más le gustaba: la pintura y la fotografía.
Su serie más conocida se llama “Peluquería” y la hizo entre 1978-1979. En estas fotos aplica la técnica de las acuarelas para conseguir colores súper saturados e irreales. Son todas muy características y pueden recordar a un mundo de fantasía u onírico.
La Movida madrileña
Aunque solo pensemos en Alaska, Ceesepe o Almodóvar, Ouka Leele también fue una de las principales protagonistas de la Movida madrileña en la década de 1980. La libertad que explotó en esa época ayudó a que Ouka Leele explotara también su creatividad.
Cabe destacar su relación con el Hortelano, pintor de la Movida. De hecho, Ouka Leele, cuyo nombre real es Barbara Allende, se puso ese nombre artístico por una estrella que aparecía en una de las pinturas de Hortelano y que recibía el nombre de Ouka Leele.
También trabajó con Almodóvar en varias ocasiones. En la película «El Laberinto de las Pasiones», Ouka Leele se encargó del diseño de vestuario, entre otras cosas más..
Su último trabajo “A donde me lleve la luz” data del 2015 y a través de fotografías retrata una mirada a Asturias y a la España rural.