Con más de 50 años de carrera en la industria de la moda a sus espaldas, André Leon Talley ha fallecido hoy a causa de un paro cardíaco a sus 73 años de edad. Con casi 2 metros de altura, una talla 52 de pie y un estilo pintoresco reflejado con caftanes, sombreros y abrigos voluptuosos; Talley deja un camino allanado a las personas negras en la industria de la moda y una carrera profesional que habla por sí sola, resaltando sus tres décadas al frente de la edición norteamericana de Vogue.
¿Quién fue André Leon Talley?
Fue pupilo de Diana Vreeland, con la que trabajó desde 1974 en las exposiciones de moda del Museo Metropolitano de Nueva York, la cual le presentó a Andy Warhol, junto al que empezó a trabajar en Interview. Consiguió abrir paso a las personas racializadas en la industria de la moda en altos puestos. Asimismo, trabajó en numerosas cabeceras de prestigio como WWD, New York Times o W.
Pero su reputación vino de la mano de sus 30 años, trabajando en la edición norteamericana de Vogue junto a Anna Wintour. En un primer momento comenzó a trabajar como director creativo hasta 1995 y, posteriormente, como redactor jefe hasta 2013, convirtiéndose así en la primera persona afroamericana en ostentar un puesto tan importante en esta industria.
Talley y el racismo
En su autobiografía denominada En las Trincheras de la moda, publicada por la editorial Superflua, Talley habla de sus máximos referentes femeninos: su abuela y Diana Vreeland. También relata el racismo al que ha tenido que enfrentarse durante toda su carrera, así como en su vida personal. Queen Kong fue el mote que le hizo dimitir de su trabajo en París: «Comparar a una persona negra con un simio es el peor y más institucionalizado acto de racismo. Es una manera de deshumanizarnos» , escribió.
No obstante, André Leon Talley ha conseguido facilitar a las personas negras el acceso a la industria de la moda. Un ejemplo de ello fue el nombramiento de Edwuard Enninful como director de la edición británica de Vogue, el cual se ha despedido de Talley con las siguientes palabras: «Descansa en paz querido André. Sin ti, no sería yo. Gracias por allanar el camino» .
Fuentes: Vogue, En las Trincheras de la moda