Un nuevo informe de Save The Children, titulado «El camino hacia la recuperación: respondiendo a la salud mental infantil en contextos de conflicto» denuncia las consecuencias mentales de l@s menores en países con conflictos bélicos.
El documento confirma que «420 millones de niños y niñas que viven en zonas de conflicto, existen 142 millones que se encuentran en lugares de ‘alta intensidad’ porque se producen más de 1.000 muertes«.
Además, estas cifras también afirman que una quinta parte de la población refugiada de estos países en guerra, requieren de ayuda psicológica. La otra parte, siguen manteniendo graves problemas mentales como la ansiedad o la depresión, entre otros.
Esta campaña, con el hashtag #NoALaGuerraContraLaInfancia, también quiere mostrar la realidad oculta de diferentes países como Siria, Palestina o Sudán del Sur y su situación actual. Por consiguiente, culpa a los países occidentales, entre ellos España, de financiar a otras potencias internacionales como Arabia Saudí con la compra-venta de armas. Esto, de forma directa, favorece a la creación de guerras en Oriente Medio y alrededores y afecta, de forma colateral, a las constantes violaciones de Derechos Humanos en dichos países.
«Cada tres horas, el número de niños y niñas en zonas de conflicto aumenta en más de 10.000… El 72 % de las muertes y lesiones de niños y niñas en las zonas de guerra más mortíferas a nivel mundial se deben a atentados suicidas, minas terrestres, municiones sin detonar, ataques aéreos y otros tipos de explosivo», confirma la ONG.
A continuación, se puede firmar una petición creada Save The Children para concienciar, denunciar y proteger a la infancia en conflictos armados.