Que tres pacientes con lesiones de la médula espinal logren ponerse de pie, caminar e incluso nadar o montar en bicicleta. Eso es lo que ha logrado un estudio suizo, a través de unos implantes que estimulan la región de la médula espinal y activa los músculos del tronco y las piernas.
¿Cuándo comenzó la investigación?
La investigación, que se ha publicado en la revista Nature Medicine, comenzó en 2018 por el investigador Gregoire Courtine, de la Escuela Politécnica Federal de Lausana (Suiza), y Jocelyne Bloch, del Centro Hospitalario Universitario de Vaud (Suiza).
Ambos consiguieron que David Mzee, paciente con una lesión parcial de la médula espinal, comenzase a caminar con la ayuda de un andador al utilizar la estimulación eléctrica para reactivar las neuronas espinales.
Actualmente, estos dos investigadores han logrado perfeccionar su sistema con implantes controlados por software de inteligencia artificial, lo que ha permitido que tres pacientes con lesión medular completa vuelvan a caminar.
«Nuestros algoritmos de estimulación aún se basan en la imitación de la naturaleza. Y nuestros nuevos cables blandos implantados están diseñados para colocarse debajo de las vértebras, directamente sobre la médula espinal. Pueden modular las neuronas que regulan grupos musculares específicos. Al controlar estos implantes», ha explicado Courtine.
¿Cómo ha avanzado esa investigación?
Uno de estos pacientes con lesión medular completa es Michel Roccati, que sufrió un accidente de motocicleta que le provocó quedarse parapléjico. El equipo de investigación colocó el nuevo cable implantado en su médula espinal y adjuntaron dos mandos de control al andador del paciente que, a través de una conexión inalámbrica a una tableta, envía las señales a un marcapasos en el abdomen del paciente.
Este marcapasos transmite las señales al cable espinal implantado que estimula neuronas específicas, lo que permite al paciente que se mueva. «Los primeros pasos fueron increíbles, ¡un sueño hecho realidad. He pasado por un entrenamiento bastante intenso en los últimos meses y me he fijado una serie de objetivos. Por ejemplo, ahora puedo subir y bajar escaleras y espero poder caminar un kilómetro para esta primavera«, ha celebrado Roccati.
«Nuestro gran avance aquí son los cables implantados más largos y anchos con electrodos dispuestos de manera que se correspondan exactamente con las raíces de los nervios espinales. Eso os da un control preciso sobre las neuronas que regulan músculos específicos. En última instancia, permite una mayor selectividad y precisión en el control de las secuencias motoras para una actividad determinada», ha asegurado Bloch.
Los investigadores reconocen que en un solo día con este dispositivo se logra un gran avance aunque matizan que este será mayor después de varios meses. Los tres pacientes han seguido un régimen de entrenamiento basado en los programas de estimulación y así han podido recuperar masa muscular, moverse de manera más independiente y participar en actividades sociales.
Fuentes: Nature Medicine y Europa Press.